jueves, 28 de noviembre de 2013

Hoy no.

No puedo evitar la contradicción que siento. Momentos en los que me considero infinitamente feliz y, momentos en que no te veo ni de lejos, felicidad. Me encantaría desahogarme, pero siempre pienso que vale más evitar este momento. Como me toquen el corazón, lo derramo, pero, si no me lo tocas, mejor. Hay días que se me hacen eternos. Hay momentos en que no se cómo contarlo.Creo que no quiero que me escuchen. Pero llega un punto en que tú sola no puedes ya. Es imposible no explotar. Como esa bufanda que se te engancha y no te puedes quitar, como esa bota que te cuesta sacar, como ese llanto de niño que no te deja estudiar. Siempre trato de buscar lo positivo, siempre intento ver que en el fondo de todo, no me puedo quejar, pero, a veces me canso y no puedo más. A veces no soy valiente y me regaño por ello. A veces es imposible mantener un equilibrio con tu mente. A veces es así y te tienes que aguantar. Ojalá me escucharas y se cumpliera todo lo que deseo, y anhelo.

No quería dejar pasar un día más sin escribir,
hoy no hay fe, pero mañana la tendré !.

Sed felices.
Un beso !